Su actitud solo beneficia a la empresa

Su actitud solo beneficia a la empresa y debilita a la representación de los trabajadores. Centran su lucha en contra de sus adversarios sindicales, en lugar de unirse codo a codo con ellos, para ser más fuertes y conseguir mejores condiciones. Basan sus acciones en la descalificación sistemática de su iguales, con el único fin de ensalzarse ellos, eso demuestra su pobreza. Niegan la evidencia de la capacidad de trabajo ligada con el número y así no funciona la cosa, eso es una burla. No hacen más dos delegados que nueve. En el mundo sindical como en casi todos los ámbitos, el número si importa, entre otras cosas porque los super hombres no existen. No se puede engañar a los compañeros continuamente. ¿Por qué se presentan para ocupar unos puestos? Si no estan convencidos de lo que hacen, mejor sería que no lo hicieran, porque con su actitud le estan hurtando el puesto a alguien que si que esté convencido de lo que hace y además quiera hacerlo. Aquí la cuestión no está en ocupar un espacio por reacción o por oposición, sin ningún convencimiento, eso no es honrado. Todos somos prescindibles y siempre habrá alguien que lo pueda hacer mejor que nosotros. Los delegados de CC.OO. de Cajamar Catalunya. Somos un equipo cohesionado, que podemos dar cauce a las aspiraciones de la plantilla. Estamos convencidos de lo que hacemos, queremos hacerlo y sabemos hacerlo y por delante de cualquier otra cosa, ponemos el interés general, aunque a veces sea a costa de sacrificar nuestro futuro profesional y nuestras aspiraciones. Esa debe ser la esencia de cualquier delegado: Entrega desinteresada al servicio de los demás. En nuestras filas no tiene cabida nadie que no tenga esos principios. No admitimos resentidos, ventajistas, aprovechados, ni a quien pretenda salvar su culo ocultándose en las siglas y aprovechándose de los demás, auque a veces puedan engañarnos, como a cualquiera que actua de buena fe. El motivo de existir de cualquier Sindicato, no lo es por la existencia de otro, nace de la desigualdad de puntos de vista entre el patrón y el trabajador y de la desigualdad de medios a favor de la parte mas fuerte y a eso solo se le puede hacer frente mediante la lucha sindical, organizada y dirigida hacia la consecución de mejoras, haciendo prevalecer la razón antes que la fuerza, pero estando preparados y convencidos para utilizar la fuerza, cuando el camino de la razón se haga impracticable.